Arcachon: ostras... y algo más

martes, 22 de febrero de 2011 22.2.11 Publicado por Raquel Navarro
Paseando por el centro de Madrid me he encontrado con un letrero enorme en la puerta de un bar que anunciaba que tenían ostras de Arcachon. Y me he acordado de este lugar del que os quería hablar desde hace tiempo. Las ostras son su mejor reclamo, pero hay muchos otros motivos para viajar aquí.





Para empezar, por su emplazamiento. La localidad de Arcachon se encuentra en la costa atlántica francesa, justo en la bahía que lleva su mismo nombre. Al norte de Las Landas y a una hora de Burdeos.


Arcachon nació como un pueblo de pescadores. A principios del siglo XIX, el auge de los balnearios y las estaciones termales propició la creación de una estación de tren, dentro de la línea Burdeos-La Teste. Arcachon ganó una tremenda popularidad y comenzó a atraer a las familias acomodadas del país, que elegían este destino para descansar y tratar sus dolencias.
En 1862 los hermanos Péreire (empresarios ferroviarios) crearon la "Ciudad de Invierno". Un barrio situado sobre la montaña, con vistas al mar, que en poco tiempo se convirtió en el centro económico local. A lo largo de sus sinuosas calles se levantaron villas señoriales de fachadas góticas, balcones de madera, torres y jardines exóticos. En 1985 la Ville d´Hiver se convirtió en monumento histórico de Francia.


Además de los balnearios, Arcachon cuenta con numerosos atractivos naturales. En sus alrededores se encuentra la duna de Pilat. Surgida entre el mar y el bosque de las Landas, esta formación de arena de 3 km de longitud y 110 metros de altura ofrece unas vistas de la región inmejorables.


Dando un paseo en barco podemos ver el banco de Arguin, una reserva natural donde anidan cientos de aves. Y cerca, podremos vislumbrar dos cabañas que surgen del agua, son las llamadas tchanquées, que indican a su espalda la Isla de los Pájaros, una pequeña isla dentro de la bahía en la que se refugian las aves.


El paseo marítimo, la lonja, el Museo Acuario o el mirador Belvedere son otros de los principales puntos turísticos. Y, como decíamos al principio, las ostras. La bahía de Arcachon es una de las principales cuencas francesas en la producción de este molusco. En esta zona se consumen todo el año, acompañadas de pequeñas salchichas (crépinettes), con un vinagre de chalotas, crudas, calientes e incluso con foie. Y siempre acompañadas de un buen vino de la zona de Burdeos.

Ahora que llega el buen tiempo, ¿a quién no le apetece pasearse por Arcachon y tomarse unas ostras con una copa de vino frente al mar?

Fotos: www.arcachon.com, rufino, sam nimitz, pvaneynd, Emilio del Prado (flickr)

0 Response to "Arcachon: ostras... y algo más"

Publicar un comentario